recetas para el buen yantar
Guiso de choupas (pota)
Estupendo guiso de choupas, muy sencillo de hacer, y que se puede servir acompañado de arroz en blanco o de patatas cocidas en la propia salsa.
Comentario
Un plato sencillo de hacer una vez que se han limpiado y troceado las choupas. Normalmente, en las pescaderías ya las limpian, sobre todo cuando se les da permiso para abrirlas porque después van a ser troceadas. Aún así, hay que pasarles un agua y quitar algún resto que suele quedar, para después trocear. Este proceso, por lo menos a mi, me lleva algo de tiempo (tiempo que ya he contado en los 90 minutos).
Es más, lo que yo suelo hacer es comprar choupas que sirvan para congelar y según llego a casa, las limpio, las troceo y las congelo en una bolsa. Así, cuando decido hacer el guiso ya no me da ninguna pereza porque sólo hay que descongelar. En cambio, me da pereza ir a comprarlas porque sé que al llegar a casa me toca el proceso que no me divierte.
Ingredientes
- 1,4 Kg. de choupas (pota)
- cebolla grandecita
- 2 ó 3 dientes de ajo
- un trozo de pimiento
- tomate grande pelado
- hoja de laurel
- sal
- pimienta blanca molida
- aceite de oliva
- chorro de vino blanco
Pasos para su elaboración
La anécdota de esta receta
Anécdota número 1
La cuestión es que mi guiso de choupas entusiasmaba a todo aquel que lo probaba, pero a mi no acababa de convencerme porque seguía pareciéndome mejor el que hace "my mother".
Un día, hablando con ella, descubrí que me faltaba la hoja de laurel, y el guiso mejoró mucho, pero todavía no conseguía ser tan rico como el suyo. ¿Qué pasaba?
Seguramente esto que voy a contar a continuación tenga que ver con mi pertenencia al distinguido grupo, del que ya he hablado en alguna ocasión, PFSPPYC (Personas que Frieron Sus Primeras Patatas Ya Casadas) y hasta puede resultar algo increíble, pero certifico que es verdad como la vida misma.
Pues resulta que cuando empecé a cocinar siempre procuré enriquecer en vez de cocer, y prácticamente a todo le echaba la pastilla de caldo de ave. ¡Y cómo no!, también a mi guiso de choupas. ¡He ahí la diferencia.!
Alguno pensará:
- ¡Qué cerdada!
Pues nadie lo había notado.
Anécdota número 2
En las pescaderías las choupas suelen estar etiquetadas con “pota”.
Pues yo llegue a la pescadería de un recién inaugurado hipermercado y pedí mi kilito de choupas. El pescadero, muy amablemente, me dijo:
- Sí, ahora mismo.
Y a continuación veo que por lo bajini le pregunta a su compañero de pescadería:
- Oye, ¿qué son las choupas?
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